¡Al ritmo de la naturaleza!
Como lo marca la tradición, cada año
los pastores y sus rebaños realizan
la trashumancia en montaña.
Cada día, prepararan quesos con la leche cruda, fina y untuosa de sus ovejas, respetando la tradición.
Al día siguiente de su fabricación, los quesos son introducidos en nuestro túnel de montaña para iniciar la operación de afinado.
Después de su completo escurrido, el queso es salado con sales de Salies de Bearn.
Posteriormente es, durante un largo periodo de tiempo, afinado, secado, frotado y volteado cada dos días sobre planchas de madera de abeto.
Los quesos alcanzaran su completa madurez en nuestras cuevas.
La corteza del queso es completamente natural,
sin colorantes ni plastificantes añadidos artificialmente. Su color varia de amarillo anaranjado al marrón o gris.
Los quesos de granja afinados y comercializados por la quesería PARDOU son todos fabricados en montaña.
Queso de granga afinado en túnel de montaña.